viernes, 22 de enero de 2010

Masajista detenida por robo de motocicleta deportiva


Por ARTURO ESPINOZA
XALAPA, VERACRUZ

La empleada de una casa de masajes, fue detenida luego de ser presuntamente cómplice en el robo de una motocicleta deportiva que su “novio” salió a probar mecánicamente para no volver más, por lo que la “masajista” fue aprehendida, misma que dijo desconocer sobre el hurto del vehículo y quien ya se encuentra a disposición del Ministerio Público.
Los hechos se registraron cuando elementos de la Policía Intermunicipal Xalapa-Banderilla-Tlanelhuayocan, fueron alertados mediante el número de emergencias 066, que se trasladaran hasta la calle Prolongación Veracruz, colonia Lerdo de Tejada, donde se había suscitado el robo de una motocicleta deportiva de lujo.
Los uniformados se trasladaron hasta el mencionado lugar, donde se entrevistaron con un sujeto que dijo llamarse, Oscar Ricardo Morales Andrade, de 37 años, con domicilio en la colonia José Cardel, de ocupación comerciante, quien les entregó a una mujer que iba acompañando a un sujeto que robó una motocicleta deportiva.
El agraviado señaló que un día antes en un lote de autos, un sujeto se presentó y pidió probar una motocicleta Honda, tipo CBR, 929, sin placas de circulación, color amarillo con negro y rines cromados, ya que supuestamente la iba a comprar.
Sin embargo, fue informado que no podía probar la motocicleta, por lo que ayer por la noche, se volvió a presentar pero en compañía de una joven que dijo llamarse, Araceli Suárez, con domicilio en la , colonia Dolores Hidalgo, de ocupación empleada de una casa de masajes.
El ladrón convenció al comerciante de probar la motocicleta y que ahí dejaría a su “novia”, como un voto de confianza, por lo que se llevó el vehículo, pero después de tardar mucho, el agraviado cuestionó a la masajista sobre su “novio”, misma que sólo se reía.
Minutos más tarde, el agraviado recibió una llamada, en la cual el ladrón le dijo que la motocicleta se había descompuesto cuando circulaba sobre la glorieta “Araucarias”, por lo que el comerciante mandó a un empleado a checar la unidad, sin ser encontrada.
Después de no encontrar al sujeto, el agraviado cuestionó a la joven, quien manifestó que no conocía al ladrón y que había sido contratada por él para acudir a una fiesta y debía decir que era su novia.
Momentos después el agraviado solicitó que la masajista fuera intervenida, por lo que los elementos policiacos la aseguraron y trasladaron al cuartel “Heriberto Jara Corona”, donde el departamento jurídico determinó ponerla a disposición del Ministerio Público, donde sería definida su situación jurídica